A Diego Armando Maradona se le reconocen extraordinarias virtudes en una cancha de fútbol. Regates, destreza, gambetas, y una velocidad eléctrica sosteniendo el balón con la punta del botín como pocos lo lograron. El Pelusa dibujaba _ores en el césped. Y quizás sea el futbolista más elegante y vistoso que ha pisado un campo de juego, con un estilo único e irrepetible. Cuando estaba en un campo de juego, un hierro magnético, prodigioso, encandilaba la vista.
Sobre su historia se han escrito libros y canciones. Los relatos de sus legendarios goles se extienden por todos los rincones de la tierra. Con su reciente fallecimiento, nació la leyenda, aunque el mito estaba instalado en el colectivo humano cuando levantó la Copa del Mundo en México 1986. Sin duda, un genio, al igual que Pelé y Messi.
Este conjunto de cuentos que presentamos en este libro – Cuentos de fútbol por autores chilenos-, es un homenaje al Cebollita de Villa Fiorito, a aquel pequeñín pobre, inocente y humilde, pero con la cabeza excesiva en sueños, que desde una cancha de tierra anhela defender a su Selección Nacional y levantar el máximo trofeo del orbe.